HISTORIA
La obra reformada en Costa Rica comenzó a mediados de 1984. Misioneros de la Iglesia Cristiana Reformada de Norteamérica (CRC) habían iniciado obras en Honduras y Nicaragua, pero aún no había iglesia reformada en Costa Rica. Algunas denominaciones de trasfondo inicial presbiteriano ya habían abandonado sus raíces, y estaban adoptando el pentecostalismo. Además, había muy pocas iglesias de corte histórico, y casi ninguna denominación confesional. Se vio la necesidad de una obra reformada.
Entre los que llegan en estos primeros años fueron el pastor Guillermo Green y su esposa Aletha. Junto con el recién convertido hermano, Roberto Venegas, laboran en el sector de Guadalupe. Dos iglesias toman forma, en Tepeyac y en Los Cuadros, Purral Arriba. Roberto Venegas se prepara teológicamente, y asume el pastoreo de la congregación en Tepeyac. Marvin Briceño llega desde Nicaragua para reforzar la obra en Los Cuadros, y se establece la obra ahí con solidez. La misión de la Iglesia Cristiana Reformada inicia obras en varios lugares, incluyendo San José, Alajuela y Puntarenas. Pero el esfuerzo de la misión carece de continuidad, y la misión termina su trabajo en Costa Rica a finales de los años 90. Diferencias de teología y gobierno produjeron una separación con las otras dos iglesias, y Tepeyac y Los Cuadros siguen adelante sosteniendo el fundamento reformado confesional. Toman el nombre de “Iglesia Presbiteriana Reformada de Costa Rica”.
En estos años (1993) se establece el “Centro Educativo Cristiano Reformado” (CECRE), institución educativa escolar. Aletha Green sirve de directora durante 15 años, en los cuales CECRE logra construir una primaria y después de 20 años de lucha, termina el edificio de su colegio en 2018. El programa educativo crece hasta proveer los niveles de preparatoria hasta undécimo. Su visión es proveer una educación escolar netamente cristiana, bíblica, cristocéntrica y reformada. Esto incluye impartir una cosmovisión reformada de la vida y la sociedad. El pastor Donald Herrera se une al equipo, ayudando como capellán a reforzar el área de biblia y cosmovisión. Establecer una escuela reformada no ha sido fácil debido a muchos factores, que incluyen actitudes de algunos padres que no comprenden los principios de la educación cristiana, la necesidad de capacitar a los profesores en una cosmovisión reformada y luchas con el Ministerio de Educación. Pero Dios es fiel, y muchos alumnos han sido formados en el Evangelio por CECRE.
Por los años 2003, 2004 se establecen dos iglesias más, una en El Carmen de Guadalupe (Pacto de Gracia), y una en Cartago (Primera Iglesia Presbiteriana Reformada de Cartago). Además, Tepeyac establece una misión en Pérez Zeledón, y luego Pacto de Gracia establece una obra en Ciudad Quesada. La denominación hoy consiste en un presbiterio de cuatro congregaciones y dos misiones. Desde sus comienzos y hasta la fecha, todas las congregaciones han sido auto-sostenidas. La misión de la Cristiana Reformada ayudó con el templo de Tepeyac, y muchos hermanos han ayudado con la construcción de la escuela y el colegio.
El deseo de todos los líderes de la IPRCR ha sido servir a la iglesia del Señor en Costa Rica, y a nuestro país. Junto con la Iglesia Bautista Reformada de Los Lagos (Heredia), promovieron la formación de una asociación de pastores y líderes reformados. Esta asociación se reúne cada tres meses para edificación, y planean el culto unido del “Día de la Reforma”, y también la conferencia anual reformada “Gracia y Verdad”. Estos esfuerzos siempre han estado abiertos al público, y otros líderes y hermanos se han unido al grupo.
GOBIERNO
La IPRCR es gobernada por un orden eclesial presbiteriano, que no permite que la autoridad en la iglesia esté en manos de una sola persona, o pocas personas, sino que sea una autoridad compartida por todos los ancianos y pastores, quienes están bajo la autoridad de su consejo local y del presbiterio. Las decisiones del presbiterio deben seguirse a menos que se demuestre que son contrarias a la Palabra de Dios. Las Iglesias Presbiterianas Reformadas de Costa Rica desean organizar su iglesia con base en principios bíblicos, con buen orden, para la gloria de Dios.
CULTO
La IPRCR sigue en la tradición de las iglesias Reformadas en cuanto a culto. Varios principios rigen para nuestro culto:
1) La Biblia establece cuáles elementos deben ser incluídos en el culto. No tenemos libertad de hacer cualquier cosa. Esto hace al culto reformado bastante sencillo y ordenado.
2) Dios recibe la gloria, no el hombre. Evitamos escenas y prácticas que exaltan a algún individuo.
3) Dios edifica a su pueblo por los medios de la gracia, que deben ser el enfoque del culto, a saber: la predicación de la Palabra, la administración de los sacramentos, y las oraciones.